La Estrella, 02 de abril de 2024.

En una apacible mañana, el maestro Jesús Antonio Giraldo compartió con entusiasmo los detalles de un proyecto que ha estado floreciendo en el corazón del Colegio Waldorf Isolda Echavarría. Acompañado por sus estudiantes, el maestro contó cómo surgió y se desarrolló este innovador sistema de riego, que hoy en día es orgullo del colegio.

El proyecto, concebido hace cinco años, surgió como respuesta a la necesidad de introducir a los estudiantes de primer, segundo, tercer, cuarto y quinto grado en el hermoso mundo de la agricultura. Ante la carencia de un invernadero en la institución, surgió la idea de construir uno. Los estudiantes, junto con el apoyo de sus padres y maestros, se embarcaron en la tarea de edificar este espacio de aprendizaje vivo.

Sin embargo, la preocupación sobre quién se encargaría del cuidado del invernadero en ausencia de los estudiantes motivó la reflexión sobre la necesidad de un sistema de riego automatizado. Fue así como el Comité Ambiental, con el apoyo de la rectora Astrid Elena Hincapié, se involucró en la búsqueda de soluciones. Tras presentar una propuesta a una convocatoria de la Alcaldía de La Estrella, el proyecto fue seleccionado para recibir fondos, inversión apoyada por la Fundación Con Vida, ICLEI Colombia y la Secretaría del Medio Ambiente de la Alcaldía de La Estrella.

El sistema de riego por goteo implementado no solo garantiza el suministro de agua preciso para las plantas, sino que también maximiza la eficiencia hídrica al dirigir el agua únicamente a las raíces. Además, se estableció un sistema para la recuperación y reutilización del agua de lluvia, lo que contribuye a la sostenibilidad ambiental del proyecto.

Con orgullo, el maestro Jesús detalló las variedades de plantas cultivadas en el invernadero, que incluyen tomates, lechugas, cilantro, berenjenas, pimentones, pepinos y más. Estas plantas no solo servirán como fuente de aprendizaje para los estudiantes, sino que también se espera que parte de la cosecha sea utilizada en el colegio y distribuida entre las familias de los estudiantes.

El compromiso con la educación ambiental no se limita solo al aspecto agrícola. Se busca inculcar en los estudiantes un profundo respeto por la naturaleza y fomentar habilidades como la sensibilidad y la voluntad. Este proyecto no solo es un ejemplo de colaboración entre la comunidad escolar y las autoridades locales, sino también un testimonio del poder transformador de la educación.

Con gratitud y esperanza, el maestro Jesús concluyó la entrevista, subrayando la importancia de inculcar en los estudiantes el amor por la naturaleza y la responsabilidad ambiental desde una edad temprana. Con proyectos como este, el Colegio Waldorf Isolda Echavarría demuestra su compromiso con un futuro más sostenible y consciente.